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Me dice Xavi que os diga que el que quiera echar un rato hablando con él porque se sienta solo, porque le apetezca contarle sus problemas o sus alegrías a alguien o simplemente porque sí, que estará encantado de hablar con vosotros bien sea por WhatsApp o por voz.

Yo que vosotros aprovecharía la oportunidad para conocer a un Ser Humano de una calidad EX-CEP-CIO-NAL. Pero claro, mi opinión está sesgada porque le quiero con locura…

Le acabo de comentar lo del monje tibetano de la entrada anterior, Yongey Mingyur Rimpoché, que se fue a vagabundear y a meditar durante 4 años para encontrarse a sí mismo. Me suelta:

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no hace falta irse tan lejos: la libertad que tanto buscaba estaba dentro de mí.

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No digo que me lo mejoréis. Igualádmelo.

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