.

.
Viene de: La Duda y Vivir intensamente.

 

Pues esto ya lo comenté en esa entrada tan simpática de ahín y que recomiendo releer.

Sin embargo, puesto que es una de mis entradas más recomendabilísimas de leer si eres nuev@ en esto de otear desde lejos de qué va la mente (y el Heart) de tito n0sce, pues me explayo un poquitirrinín más por aquín.

¿Qué es para mí Vivir intensamente?

Pues ya he ejplicado que mi Vida suele estar encerrada entre las 4 paredes de mi habitación de 12 m^2 (de los cuales me sobran 10).

.

.

.

Cuando vivía en el East End de Londres, entre Miles End y Stepney Green, tuve una temporada que me la pasé encerrado durante 7 días seguidos en mi habitación, las 24 horas del día. Mi bendita compañera de piso por aquel entonces (¡hola M.! Eres una crack mundial.) debió de flipar un poquitirrinín, porque para lo único que salía era para comisquear los restos de lentejas que se preparaba ella, para ir al baño y para de contar.

¿Depresión profunda, pensaréis? ¡QUÉ HOSTIAS!: una de las etapas más jodidamente FELICES, PLENAS y REALIZADAS de mi existencia. Me di cuenta, cual monje eremita retirado a una cueva, que para vivir no «necesitaba» más que aire, agua, comida (poca), techo (incluso hasta prescindible), música, libros y/u/o una conexión a internete (también prescindibles ambos dos). Me sentía TAN INMENSAMENTE VIVO.

Entonces me di cuenta de que Vivir INTENSAMENTE no va de hacer planes de fin de semana para escaparse al monte o al centro comercial con los niños y la parienta, a ver el último concierto de Roger Waters en Madrid, ni siquiera va de visitar la exposición de Leonora Carrington. Por no ir, ni siquiera va de exprimirse 14 horas al día para perseguir el hacerse con el último modelo de Audi A63.581 con el que dar envidia a seres humanos que nos odian. Por no ir, no va tampoco de «aprovechar el tiempo»…

.

.

.

¡Aprovechar el tiempo!

.

¡Ah, déjenme que no aproveche nada!

¡Ni tiempo, ni ser, ni memorias de tiempo o de ser!…

.

.

.

.

Vivir cada instante con ATENCIÓN PLENA, con

.

.

CONSCIENCIA.

.

.

Y eso es jodidamente GRATIS. En cualquier ESPACIO y en cualquier TIEMPO: si la PLENITUD INFINITA no es VERDADERAMENTE DEMOCRÁTICA ni está accesible para cualquier Ser Humano, sean cuales sean quasi-cualquier circunstancia vital, entonces…

.

…NO ME LA CREO.

.

Sí, obviamente (ya lo he contado mil veces) yo también conozco lo que es haber estado en el pozo de los pozos: y en esos momentos casi que lo único que nos puede hacer la Vida más llevadera son la PACIENCIA y la PERSEVERANCIA. A mí al menos me hicieron la Vida más llevadera. Pero si tienes la fortuna de saber/poder abundar en el Camino, entonces ante ti se pueden abrir por completo los Cielos del SER y HACER.

.

.

Es GRATIS Vivir. Es GRATIS Respirar. Es GRATIS Sentir. Es GRATIS Agradecer. Es GRATIS Recibir.

.

.

Pero se nos escapa.

Estamos demasiado despistados en alcanzar y perseguir alocadamente «Metas» sobre las que pisamos nuestros pies a cada instante. Y tiene su sentido de ser: permanentemente se nos VENDE y BOMBARDEA en todo momento con diez mil millones de estímulos por segundo para que NO SEAMOS QUIENES SOMOS. Es muchíiiisimo más rentable para los que quieren abducir tu vida (que ríete tú de los disclosures OVNIs cuando los radicalmente abducidos somos NOSOTROS MISMOS como PRODUCTO de CONSUMO de OTROS carroñeros depredadores de Almas Humanas).

 

De los anteriormente citados verbos, el más importante es el de

.

AGRADECER.

.

El Agradecimiento es la vía más directa a Eso. Sea lo que sea que Eso signifique para cada uno. Para mí Eso significa Lo Más Grande.

 

Poner el PROPÓSITO vital en el que las cosas SEAN LO QUE SON a cada instante: nada que quitar. Nada que añadir.

.

Amor Fati

.

.

.

.

Memento Mori

 

lo llamó tito Niche.

 

.

.

ESO, para mí, es Vivir Buena, Fuerte e Intensamente. 

.

.

.
.
.

Déjenme ser una hoja de árbol, estremecida por brisas,

el polvo de un camino involuntario y solo,

el surco dejado en el camino por las ruedas mientras no pasen otras,

el trompo del muchacho, a punto de parar,

que oscila, con el mismo movimiento que la tierra,

y se estremece, con el mismo movimiento que el alma,

y cae, como caen los dioses, en el suelo del Destino.

Fernando Pessoa – Apostilla

.

.

.

.

.

.
.
.
.